Hoy os traigo un producto que llevaba varios meses por casa y que por fin esta semana me decidí a probar. Se trata de la mascarilla facial Genomask, de los laboratorios Genove.
Sus dos ingredientes estrella son el ácido hialurónico y la vitamina C. El ácido hialurónico capta el agua y sus esferas se hinchan, haciendo que el rostro se vea más relleno, con menos arrugas y líneas de expresión. Por su parte, la vitamina c es la responsable de luchar contra la oxidación celular, la principal causa del envejecimiento. Estos dos elementos combinados dan lugar a un efecto flash que deja el rostro más terso.
También contiene extracto de quinoa, cuyas propiedades antiinflamatorias ayudan a descongestionar la piel del rostro.
El sistema es de peel-off, que particularmente son mis preferidas, ya que además de nutrir, ayuda a quitar la primera capa de células muertas y suciedad de la piel. Se extiende bien por el rostro, aunque su textura es algo líquida. Hay que dajarla actuar durante 20 minutos y luego retirarla con cuidado, tirando de la capa seca.
En general, también se retira bien, aunque hubo algunas zonas que tuve que quitar con agua. No reseca nada y deja la piel suave y aterciopelada. Noté los puntos negros de la nariz algo más difuminados.
La podéis encontrar en farmacias. Vienen 5 sobrecitos monodosis y cuesta unos 9 euros.
¿Os gusta esta mascarilla? ¿La hebéis probado?
